Lo más difícil de realizar esta singular ruta, es dar el paso inicial, y hoy por fin he dado el primero de los que al final serán miles. Mi intención era salir sobre las seis o siete, pero al final, por problemas de logística, he partido a las 8:45. Último vistazo al Mediterráneo y a correr.
El primer tramo transcurría por el torturado paisaje lunar de Cap de Creus, muy divertido y entretenido, nada que ver con lo que me esperaba después. El primer error lo he cometido en el pueblo de El Port de la Selva. En ese punto se cruzaban la GR 98 (creo) o 93, con la GR 11 y casi me voy hasta Cadaques…. Dos horas perdidas a lo tonto!! Vuelta atrás y en Llanca he vuelto a retomar la GR 11. El tramo entre Llanca y Espolla ha sido terrible, mucho calor y sobre todo muchísimo asfalto. Me he agobiado bastante y he hecho casi todo andando, no tenía motivación para correr. Por suerte, tras dejar Espolla todo ha cambiado y, cuando más cansado estaba, es cuando más he disfrutado.
El tramo entre Espolla y La Jonquera lo he hecho entre truenos y grandes chaparrones, pero como la meta ya estaba cerca, tampoco es que me haya quejado mucho. Ahora toca recuperar, mañana me espera un durísimo día.